Nacimiento y muerte del ama de casa

Nacimiento y muerte del ama de casa
Paola Masino
Traducción del italiano de Pepa Linares
AlianzaLit

Escrito durante 1938 y 1939, cuando la agitación del mundo era cada vez más violenta, Nacimiento y muerte del ama de casa es todo un viaje a la piel de una época. Una joven rechaza el mundo exterior, la luz de la vida y se refugia en un baúl lleno de arañas y libros, desde donde se hace preguntas, interroga el sentido de la existencia y las simas más profundas de su autenticidad, de los discursos por los que le gustaría discurrir toda su vida. Pero la juventud se abalanza sobre ella como una tormenta la angustia de su madre la ahoga y esas exigencias del exterior la hacen salir, dejar la fealdad y dedicarse a la cosmética para   transformarse, irremediablemente, en el Ama de casa por antonomasia: el papel que todos le asignan con su mirada.

A partir de esa transformación, también llamada matrimonio, la rebeldía de esta Ama de casa hierve siempre bajo las necesidades del hogar, las cenas fastuosas y la imposibilidad de volver a encontrarse a sí misma, por mucho que huya y se busque en los reflejos. Sobre ella pasan los años, llega la guerra y la decepción no deja de crecer, de abalanzarse sobre todo aquello que no fue y era tan fácil en su oscuro baúl: la renuncia se convierte, para ella en una urgencia constante por encontrar un nuevo sentido que nunca llega.

Nacimiento y muerte de un ama de casa es un libro febril, donde el surrealismo aparece a cada paso y que mezcla a de Chirico y Buñuel con escenas teatralizadas y diarios encontrados, donde la furia es a veces violenta y otras fantasiosa, incapaz de soportar tanto la disciplina como la mediocridad. Una novela en medio de una guerra mundial e interior de una mujer que fue una gran promesa y cuyo camino no fue una vía libre hacia el reconocimiento literario sino presa de meandros, bombardeos y abandonos a la sombra de grandes nombres y cortinas caras en Venecia. Porque el Ama de casa es la furia que Masino sentía por dentro sin poder darle el nombre correcto. 

Pilar Torres

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