Marley estaba muerto – Carlos Zanón – RBA
La navidad es uno de los rasgos comunes que hilan estos 25 cuentos aquí reunidos. Que Marley estaba muerto no es nada nuevo, pero sí esta manera que Zanón tiene de mirar una Barcelona barrial y decadente. Por sus páginas transitan personajes engolfados, abogados que nunca desearías que te tuvieran que defender, camellos de tres al cuarto, un tío que aperece en agosto creyendo que es navidad y hasta mismísimo Elvis.
El escritor catalán escribe con nervio noir y a la vez es capaz de enlucir sus páginas con una bruma poética. El autor de Yo fui Jonnhy Thunders (2013, RBA) tiene un fraseo veloz y cortante. Duro en los temas, sensible en las formas, como si la navaja a la que se acerca, además de hacer sangrar, cortaran las sogas que liberan su literatura.
No es casualidad que este conjunto de cuentos estén agavillados con el espíritu rasta de Marley, la música anega los cuentos, los vivifica. Zanón deja que las canciones corran por entre sus párrafos como sueños solitarios. Hay una reivindicación de un periodo cultural finiquitado del que el escritor no sólo se resiste a olvidar, sino que reivindica. La música es central para el autor de Rock’n’roll (2014, 66 RPM). Preferir a Lennon o a McCartney, aquí, tiene una importancia vital.
Ahora que la navidad nos llena a todos de buenos sentimientos, leer los cuentos de Zanón sirve de contrapeso, para que cuando llegue enero, el golpe de realidad no sea tan duro. Aunque entiendo que a muchos lectores les gusten los contrastes. Por si acaso, en La Buena Vida avisamos. Pero por lo que pueda ocurrir: Feliz Navidad y mucha literatura.
