La vida negociable
Luis Landero
Tusquets, 2017
Luis Landero es, ante todo, un narrador de historias natural, y uno va leyendo sus libros, los mejores, como hipnotizado por las palabras y las aventuras de los protagonistas. De esta manera natural, de una facilidad pasmosa, nos cuenta la vida de Hugo, un auténtico fracaso vital, incapaz de enderezar la relación con unos padres que, como todos, no son perfectos, pero que viven volcados en él intentando sobrevivir a sus propios fracasos personales
Pero nuestro protagonista, convierte cada fracaso en una virtud, en un espaldarazo para retar a la aventura vital. Como una Esperanza Aguirre que acaba declarando que es ella la que ha destapado la Gürtel, así nuestro protagonista hace alarde de un capacidad innsodable para la posverdad más íntima, la que aplicamos sobre nosotros mismos y los que nos rodean.
Una primera parte de la novela de un costumbrismo ágil y divertido, con unos personajes que encontraríamos en muchos edificios de esos que conservan la portería con derecho a cocina, y que acaba evolucionando hacia una desquiciada caída por el barranco de la vida, que arrastra en parte a la propia novela que pierde algo de credibilidad pero que no deja en ningún momento de divertir, llena de personajes tan cercanos, que uno quisiera alejarse para mirarlos mejor.