La séptima función del lenguaje

La séptima función del lenguaje

Laurent Binet – Seix Barral

En La Buena Vida somos muy dados a marcarnos principios muy firmes solo por el gusto de saltárnoslos. Uno de los míos es despreciar con mi indiferencia a la novela policiaca, pero en cuanto vi Roland Barthes en la contra del nuevo libro de Binet tuve que lanzarme sobre él antes de que algún semiólogo se me adelantara.

La séptima función del lenguaje despliega la rive gauche de los ochenta a partir del atropello de Roland Barthes por una furgoneta tras una reunión con el candidato Mitterand. Sus amigos, enemigos y envidiosos con nombres que ilustraban portadas (Kristeva, Sollers, Foucault, Derrida o Lacan) van desfilando ante la atónita mirada de un Watson reaccionario, el inspector Bayard, y un Sherlock que deja la teoría sobre James Bond para convertirse en un superhéroe capaz de leerlos signos ocultos con un traje impoluto. Porque aquí el lenguaje es el arma de destrucción masiva que, una vez activado, puede hacer estallar el equilibrio internacional, las elecciones presidenciales o la jerarquía de poder entre los filósofos del lenguaje a ambos lados del océano.

Al esquema de la novela policíaca, con sus crímenes pasionales, robos asombrosos, escenarios secretos y sospechosos que se pasan continuamente el testigo, Binet suma un juego de risas al imaginar la vida íntima de los pensadores más reconocidos de la época. Su sordidez, sus comentarios inexplicables y misteriosos tiñen también el lenguaje de la novela, como si pudiéramos abismarnos ligeramente en la mente de Foucault, Kristeva o Derrida.

Como en El secuestro de Perec, aquí el objeto perdido es tan etéreo y misterioso que continuamente despierta el asombro y la intriga de cómo ha llegado la situación hasta ese punto. Pero la semiótica pronto conquista, porque no hay nada más detectivesco que buscar los indicios de lo que somos y escondemos a partir de lo poco que se muestra, de las palabras que se eligen  y los gestos con los que se saluda. El lenguaje se convierte en el principal arma de los personajes de la novela, que necesitan encontrar las teclas perfectas para detonarla antes que sus contrincantes.

La séptima función del lenguaje es un libro entretenidísimo que homenajea sin vergüenza ni reverencia a la vida intelectual de la Francia de los 70 y 80, aquella que sentó las bases para muchas de las interpretaciones filosóficas que se hacen hoy en día. Althusser, Derrida, Searle, Jakobson, Derrida, Judith Butler, Umberto Eco o Barthes son aquí piezas fundamentales en los poderes oscuros del mundo, como si a los conspiranoicos de las novelas policiacas les gustara salir y discutir en prime time. Una novela que convierte la realidad en mitología y relee la historia desde la opción menos realista posible.

Pilar Torres

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