Sunset Park
Paul Auster – Anagrama
Se lee fácil esta novela de Auster. Tras la muerte de su hermano, Miles huye del domicilio familiar y recorre el país intentando hacerse “mejor persona”. El amor de una joven le obliga y, al mismo tiempo, le da fuerzas para enfrentarse al pasado y volver a contactar con sus padres. Entre medias, topará con una galería de seres singulares, todos ellos en un momneto de crisis personal que cada uno salda a su manera (como todos , ¿no?). En una casa ocupada en New York, Miles encuentra un refugio momentáneo para lo que parece la vuelta al guión naural de su vida, pero … Cada vez más se aprecia en los libros de Auster la necesidad de hablar sobre temas y opiniones supeditando en buena medida el desarrollo de sus personajes a esta intención. Ayer entró un cliente en La Buena Vida preguntando qué libro podía regalar a una amiga, mujer en crisis de los 30 … Los personajes están ahí, curando las heridas de una adolescencia tardía y decidiendo si cruzar el puente de Brooklyn o instalarse definitivamente en la “Gran Manzana”.
Gracias por tu comentario. Otras de las cosas que cuentan estos personajes, que en principio son unos solitarios vitales, es que compartir con otros esa búsqueda solitaria de nuestro camino, no nos quita independencia, sino que nos enriquece y nos deja margen para caer y agarrarnos sin llegar al suelo.
Paul Auster se caracteriza por su manera descarnada de dibujar los personajes y en esta última entrega se supera. Estos seres no son heroes ni villanos. No se enfrentan a grandes hazañas, solamente tratan de sobrevivir a su propio espanto, un día a la vez, de la mejor manera que sus limitaciones lo permiten.
Paul Auster nos dice en Sunset Park que ser egoístas, cobardes, frívolos, traidores o, incluso, haber perdido toda fe en nosotros mismos y lo que nos rodea no nos convierte en monstruos, nos hace humanos.
No su mejor novela y un final demasiado abierto para mi gusto pero vale la pena.