Belan Garcia Abia – Errata Naturae
Se podría leer como un poema con epílogo. Un poema que busca nombrar para entender. En El cielo oblicuo una mujer lucha contra, y en, la fatiga de convivir con la maternidad impuesta. La imposiblidad de ser entronca con un lenguaje voraz, bello y destructivo a la vez. Hay una potencia implícita, una ira, en la voz la narradora que arremete con fuerza contra aquello que la rodea. Y el lector no sale indemne.
El útero es un arma de doble filo, un cubículo en el que es posible la armonía y la enfermedad. La escritura es un posible vehículo de salvación. Aunque no siempre. La realidad es la crudeza de los días y el vano asir con el que las palabras buscan un sentido de lo que acontece. Los miomas, los pechos, la vulva… el mundo femenino convertido en monstruo.
Belén García Abia ha escrito una novela poética, y breve, salpicada de referencias literarias. De la Yerma de Lorca a la exquisita locura de Pizarnik, pasando por Lispector, santo y seña de identidad de muchas poetas. De la mujer que busca a través de la escritura el sentido de la vida y de sus dificultades para ser y estar en un mundo de cicatrices y costuras parece tratar El cielo oblicuo. Son duras las palabras que supuran poesía. Porque es eso, poesía, lo que el lector encontrará en este cielo en desequilibrio.