El mes más cruel
Pilar Adón – Impedimienta
Para Nacho Vegas no es abril el mes más cruel. Para Pilar Adón… no lo sabemos. No nos lo dice aunque habla de otoños largos y veranos calurosos, de bosques, de ojos y paredes color verde cuya intensidad te atrapa, literalmente.
Sus protagonistas no son fuertes aparentemente pero pasean en los relatos de Pilar Adón, porque eso siente el lector al coger su libro, que va paseando de la mano de sus protagonistas por las casas que habitan y que tan bien describe la autora, haciendo que el espacio sea un personaje más, tanto que nos parece conocer todos los rincones, rincones donde siempre hay alguien leyendo.
Sara es una mujer desesperada pero inteligente, Olivia “cura” a los demás, Gabriel no habla porque ya lo hace su madre por él, la institutriz obsesionada con la elegancia acompleja a su pupilo, el maestro y el alumno que no coinciden en la forma de ver la vida, la paciente amante que ve como su amor quiere a otro…
Diferentes relatos con diferentes protagonistas que tienen en común su delicadeza, todos ellos penden de hilos invisibles que les sostienen a la realidad, en unos casos elegida voluntariamente y en otros obligada. Pilar Adón acaba de recibir un premio como poeta y precisamente los poemas que acaban cada uno de los relatos de El mes más cruel nos cierran el círculo de sus historias.