“La verdadera vida, la vida por fin descubierta y aclarada, la única vida, por consiguiente, plenamente vivida, es la literatura: esa vida que en cierto sentido vive a cada instante en todos los hombres tanto como en el artista, per no la ven, porque no intentan aclararla”
Este dandi apegado a las faldas de su madre y que editó un solo libro en vida es, sin duda, la influencia más importante en la literatura de los dos últimos siglos.
La publicación en noviembre de 1913 de Por el camino de Swan, nos permite celebrar un centenario con un despliegue de ediciones singulares.
Marcel Proust. La memoria recobrada es un album para fetichistas que recorre, fundamentalmente mediante material gráfico, toda la vida del autor, su entorno personal y geográfico y su obra.
El abrigo de Proust es un maravilloso y original recorrido, casi policíaco, que usa como hilo conductor la venta de los enseres personales del autor, por parte de sus herederos, al millonario Jacques Guérin. Una delicia de texto para los seguidores y curiosos del escritor y su época.
Monsieur Proust son las memorias del ama de llaves de Proust durante sus últimos años de vida, donde la escritura de su obra consume a un autor dedicado a la literatura. Céleste Albert escribe con cariño y afecto unos recuerdos únicos que contrastan con parte de la leyenda del genio.
Proust, de Becket, es una recopilación de ensayos del dramaturgo, ferviente admirador de Proust, sobre la obra del francés, llena de guiños a su propia obra y puerta de entrada a una lectura de ambos autores.
Valdemar dispone de una edición en tapa dura en un estuche de tres volúmenes magníficamente editados de A la busca del tiempo perdido, con traducción de Mario Armiño.
RBA está publicando los siete volúmenes con la traducción de Carlos Manzano, anteriomrente disponible en Random House, en tapa dura.
Una gran obra llena de vericuetos…