Frances – Joanna Hellgren
Ediciones La Cúpula
Los niños saben hablar de los adultos con una habilidad y una claridad tan espontáneas que les convierte, la mayor parte de las veces, en seres más adultos que los propios adultos. Ese estatus se lo da mirar el mundo en el que están inmersos de otra forma. La mirada infantil es lo suficientemente alejada y extraña como para resultar cómplice y/o realista, hiriente y/o crítica, según toque.
Frances es la niña que mira y desarrolla para nuestros ojos esta historia de resistencia absoluta. Su madre se largó después de parirla. Su padre, August, se quedó con ella, pero es un nómada en búsqueda continua de trabajo, y Frances siempre está al albur de distintos cuidadores. La muerte de August obliga a Frances a irse a vivir con su tía Ada y su abuelo. A tener un hogar estable. Con todos sus condicionantes.
El trazo onírico y preciosista de Joanna Hellgren aporta un matiz perfecto como contrapunto a la dureza, el miedo, la soledad, la memoria perdida, la ocultación y el anhelo de felicidad que reposa en los hombros de todos los resistentes que conforman este bellísimo y particular relato.