Solo
August Strindberg – Mármara
Cuando uno lee las frases de las fajas de los libros pasea ya la mirada sin esperar encontrar nada más que frases sacadas de contexto, o citas interesadas de apoyo entre escritores. Yo leí:
“Me siento mucho mejor porque he leído a Strindberg”. Frank Kafka
Esta impresa en la contraportada de esta edición de la muy sugerente Mármara Ediciones.
Le en el interior:
“Lo primero que uno alcanza en la soledad es un compromiso consigo mismo y con el pasado. En mi caso, el compromiso comenzó hace diez años, cuando conocí a Balzac. Durante la lectura de sus cincuenta volúmenes no me di cuenta de lo que sucedía en mi; fue al terminar. Resultó que me había descubierto a mí mismo, que podía hacer la síntesis de las antítesis que habían permanecido sin resolver durante toda mi vida. En mi itinerario por la comedia humana, de la mano de Balzac, conocí a cuatro mil personas y creí vivir una vida distinta, más grande y más rica que la mía, de forma tal que, al final, me parecía haber vivido dos vidas humanas”.
Como pensamientos perdidos en un largo paseo, como reflexiones andando de vuelta a casa después de una cena entre amigos en una noche fría… así se van dejando leer estos párrafos que hablan con una agudeza de observación que reconforta en la soledad de la lectura. Un paseante atento por el mundo, que recuerda pasajes de conversaciones participadas o entreoídas, de fogonazos entrevistos al pasar delante de ventanas descubiertas, que se mira a sí mismo en la soledad de una habitación. Un libro que reconforta y nos vuelve sobre nuestra más inteligentes puesto que nos expone e incita a ser autores de una lectura de todo lo que nos rodea: la primavera, las personas, el tiempo, el paisaje, la palabra, la soledad, los barruntos del amor, todo merece, en este diminuto libro para una paseo otoñal, una línea al menos de un genial Strindberg.
Tengo el libro, incluso ayer lo saqué de la estantería, apuntando a lectura inmediata, a no mucho tardar. Es un libro corto, pero tengo la sensación que es de los que leeré despacito, que no desperdiciaré ni una coma.
Un abrazo