La habitación muda
Herbjorg Wassmo – Nórdica

Otra vez Tora, Rakel, Ingrid … ese trío de mujeres reales en un mundo más que real. La segunda parte de la Trilogía de Tora, de la que ya disfrutamos del primer volumen, La casa del mirador ciego, nos deja con la respiración entrecortada. Una novela apasionante, dura, tremenda que, de nuevo, nos da el coraje para vivir que nos muestra sus personajes.

Las vidas de nuestros protagonistas siguen su curso en la Isla, ese pueblecito pesquero que no es más que un teatro sin moqueta, ni butacas lujosas y donde la única luz la ponen Simon y Rakel, los tíos de la protagonista, las únicas personas que insuflan calor al alma de Tora para que viva entre tanto frío.

Esta es una novela de mujeres, sin lugar a dudas, pero para eso leemos, para saber de las vidas de otros y, por eso, su lectura será una sorprendente maravilla para todos los que se atrevan a coger el barco que les deje en el pequeño puerto de la Isla, y acepten vivir allí un par de semanas con la lectura de la prosa de Wasmo.

«¿Será por la capacidad de los débiles de almacenar todas las desgracias, todos los puñetazos, las humillaciones, las burlas, hasta qeu finalmente adquieren una fuerza que se prende en sí misma y lanza chispas de odio y venganza y que puede derrotar a cualquier cosa? ¡Cualquiera! … Porque con esa sabiduría está hecho todo. Quien es golpeado será golpeado eternamente. Una y otra vez. Y el que sale libre podrá seguir libre. La justicia es una utopía por la que nadie se puede permitir sacrificar nada. No queda más remedio que continuar hacia delante.»