Wakefield
Nathaniel Hawthorne – Nórdica

¿Qué pasaría si un día dejáramos de ser nosotros mismos?
¿Qué harían los otros sin nosotros?

Inspirado en el recuerdo de un artículo en un viejo periódico, Hawthorne narra la historia de Wakefield, un hombre que decidió marcharse a vivir lejos una temporada larga. Una noche, saluda a su mujer y se marcha con una pequeña maleta. Sin explicitar la duración y el motivo del viaje, le dice que no se preocupe si se ausenta un par de días. Él mismo no sabe a lo que se enfrenta.

Finge marcharse de viaje, pero se va a vivir a un pequeño apartamento que se encuentra justo en la calle contigua. Decide pasar inadvertido y hacer un paréntesis de 20 años en su felicidad conyugal. Wakefield se ha desterrado a sí mismo.

Durante todo este tiempo, pudo contemplar lo que sucedía en su propia casa. Siente curiosidad por saber cómo habrán evolucionado las cosas allí.

¿Qué clase de hombre era Wakefield? Sus amigos lo consideraban incapaz de llevar a cabo algo que hiciera recordarlo. ¿Cómo es posible que pudiera hacer semejante acto?

¿Quién lo hubiera imaginado? Es un hombre de costumbres, se encuentra con los pies en el escalón se su propia puerta.
No obstante, si volviera a aparecer echaría a peder todo el plan. Todos lo dan muerto, aunque su mujer duda de su viudedad.  No va a regresar hasta que la Sra Wakefield esté medio muerta de angustia. La imagen que ella tiene de él se va desdibujando lentamente…

Wakefield es otro hombre. Una noche, está dando su habitual paseo en dirección a la casa que considera propia. Decide regresar.

En una edición maravillosamente ilustrada por Ana Juan, Premio Nacional de Ilustración, que incluye la versión original en inglés. Un inquietante placer para los sentidos.